miércoles, 16 de febrero de 2011

El viejo molino


El viejo molino se yergue en la colina,
entre sus blancas aspas aire fresco fluye,
produce lo justo, del trigo hace harina,
sus ingresos nunca aumentan ni disminuyen.

Su rueda es de piedra,de cal su coraza,
simple es su ingenio y bella su estampa,
su forma sencilla el paisaje abraza.
Quisieran mis ojos ver rotar sus aspas,

mas se haya postrado, parado y en calma.
Otras máquinas rugen y en vano se afanan,
por saciar con mil cosas el hambre del alma,
que no es de productos sino de fe y de gracia.

Lo observo de lejos y el mundo se apaga,
entre el humo negro que todo lo empaña.
Quizás algún día el cielo esté limpio,
y volvamos de nuevo a ver volar sus alas.

domingo, 6 de febrero de 2011

Debate: distributismo, capitalismo y socialismo.

El distributismo remonta sus orígenes teóricos a la encíclica Rerum Novarum (1891) y la obra de G.K. Chesterton e Hilaire Belloc, fundamentalmente el libro de éste último titulado El estado servil (1912). Cuando estos textos fueron escritos, si bien el movimiento socialista estaba conociendo un fuerte impulso, aún no existía ningún país cuya economía se rigiese por una sistema basado en las ideas de Marx y Engels. Sin embargo tanto en Rerum Novarum como en El estado servil encontramos una acertada y visionaria preocupación por la posibilidad de que este tipo de sistemas se acabasen implantando, ya sea como reacción revolucionaria o, como temía Belloc y esperaban los socialistas fabianos, a consecuencia de la tendencia del capitalismo a la concentración de la propiedad, siendo entonces el comunismo la forma final de ese estado servil que forzaría a los hombres a trabajar como en los tiempos anteriores al cristianismo.

El blanco preferido de las críticas de los autores distributistas actuales, que han asistido durante el siglo XX y aún pueden ver en el XXI los desmanes y atrocidades provocados por los intentos de llevar a la práctica las ideas comunistas, es el capitalismo. Tal vez sea por considerar carente de sentido la lucha contra algo que se considera pasado, si bien el país más habitado de nuestro planeta se encuentra aún bajo un régimen que conjuga lo peor de comunismo y capitalismo, pero el hecho es que, leyendo autores como los habituales de distributist review (Thomas Storck, John Médaille, ...) da la impresión incluso de que muchos de ellos abogan por la existencia de un estado fuerte ("big goverment") más allá de la idea de las subsidiariedad (o más bien que, respetando este principio, ponen el listón mínimo de ésta demasiado alto). En cualquier caso, si bien las diferencias entre los tres sistemas son considerables, este aparente "cambio de enemigo" resulta cuanto menos significativo.


Preguntas:

1- ¿Cree que el distributismo puede calificarse como una "tercera vía económica"?.

2- ¿Considera que se encuentra equidistante de capitalismo y socialismo o lo ve más alejado de uno que de otro?.

jueves, 3 de febrero de 2011

Rimillas y sainetes: Tres acres y una vaca.

Por ser viernes, nos permitimos un divertimento.
Feliz fin de semana a todos.

Propiedades se nos niegan,
los más ni siquiera alcanzan,
a ganarse servilmente,
la vida con una paga.

Si tuviesen las familias,
lo que pocos acaparan,
que de natural es suyo,
otro gallo nos cantara,

¡verían esos potentados,
la gran empresa y la banca,
lo que puede hacer un hombre
con tres acres y una vaca!


miércoles, 2 de febrero de 2011

Política económica distributista (I)


La actualidad del debate político se encuentra centrada, por una vez, en el verdadero gran problema de la nación española (al menos en el orden material, aunque también está relacionado y no poco con otro tipo de problemas de índole moral), la lamentable situación económica que, tras años de burbujas artificiales y precios hinchados, nos deja un panorama realmente desalentador que condena a cerca de la cuarta parte de la población en edad de trabajar, y casi la mitad de los jóvenes, al desempleo.

Las políticas públicas desarrolladas no han aliviado el problema, sino que más bien han contribuido decisivamente a su agravamiento, pues han servido al interés de la gran banca y de la grandes fortunas de la construcción y otros sectores cercanos al poder, y los pocos recursos que se han destinado a los menos favorecidos se han hecho en forma de subsidios que no atacan el problema de fondo y tan sólo suponen, en el mejor de los casos, un parche temporal.

¿Pueden las ideas distributistas aportar algo de luz al asunto? ¿Qué medidas inspiradas por estas ideas se podrían implementar en nuestro país?.

Si la primera víctima de la guerra es la verdad, se podría decir que la primera víctima de la crisis es la justicia. Si la especulación inmobiliaria ha hecho rica a una minoría cercana al poder, ¿porqué sus desastrosas consecuencias han de ser pagadas por una mayoría de ciudadanos prácticamente desposeídos de propiedades (o endeudados hasta las cejas para poder poseer tan sólo un modesto hogar) por esa minoría?. Una política económica distributista debería comenzar por esa idea: la justicia económica, entendida como promoción de las oportunidades y el esfuerzo personal y valoración de la vida y la condición humanas por encima de las cuestiones materiales. Se deberían fomentar los negocios de base familiar y el acceso generalizado a la propiedad. Las actividades de pequeño tamaño tendrían que ser incentivadas y tener un régimen jurídico y fiscal más atractivo y sencillo. Se debería fomentar, a partir del principio de subsidiariedad, el resurgimiento de instituciones que puedan llegar allí donde las familias por sí solas no pueden (por ejemplo, para proveerse del crédito que ahora les hes negado). En general, no se trataría de una política destinada a crear algo nuevo y distinto, sino a restituir un orden económico que ha sido quebrado por la acción de especuladores y mangantes de diversas especies y pelajes. Se trataría de una labor de reconstrucción similar a la que desarrolló Sam Sagaz tras volver a la comarca en el tercer libro de "El Señor de los Anillos" y encontrar el infierno en el que su Comarca natal se había convertido en aras de la "modernidad".

Iniciamos en este blog una lista de medidas, sin aspiraciones de exhaustividad, que a nuestro juicio podrían mejorar la situación económica partiendo de planteamientos típicamente distributistas. La lista no está cerrada sino a la espera de que ustedes, estimados lectores, tengan a bien hacer sus aportaciones. La distribuiremos en 8 grandes bloques, si bien podrán añadirse, eliminarse o reagruparse bloques. Estos bloques serían:

I. MEDIDAS DESTINADAS A FOMENTAR LA EMPRESA FAMILIAR.

II. MEDIDAS DE APOYO ECONÓMICO A LAS FAMILIAS Y FOMENTO DE SU ACCESO A LA PROPIEDAD.

III. MEDIDAS PARA MEJORAR LA LIBERTAD DE ELECCIÓN DEL TRABAJADOR POR CUENTA AJENA.

IV. MEDIDAS DE DEFENSA DE LA COMPETENCIA FRENTE A POSICIONES DE ABUSO DE GRANDES EMPRESAS.

V. MEDIDAS DE DEFENSA DEL CONSUMIDOR FRENTE A POSICIONES DE ABUSO DE GRANDES EMPRESAS.

VI. MEDIDAS SOBRE SECTORES ESTRATÉGICOS PARA EL DESARROLLO ECONÓMICO Y SOCIAL.

VII. MEDIDAS PARA EL DESARROLLO DE ZONAS DEPRIMIDAS.

VIII. MEDIDAS PARA EL FOMENTO DEL ASOCIACIONISMO Y LA ECONOMÍA SOCIAL.


Para comenzar debatiríamos, si ustedes lo tienen a bien y agradeciendo de antemano sus aportaciones, las medidas que podrían incluirse en el primer bloque:

I. MEDIDAS DESTINADAS A FOMENTAR LA EMPRESA FAMILIAR:


I.1. Racionalización del régimen fiscal de los trabajadores autónomos y pequeñas empresas, empleando facturación y contabilidad telemática para la estimación directa de ingresos y gastos, eliminando de los módulos y la estimación objetiva, reduciendo los impuestos a estas empresas y aumentando la lucha contra el fraude y la economía sumergida.
I.2. Eliminación del impuesto de sucesiones para los bienes adscritos a actividades económicas que continúen los descendientes (hasta cierto importe).
I.3. Regulación (con un régimen legal y fiscal ultrasimplificado) y fomento de las "microactividades" (actividades económicas y artesanales desarrolladas a tiempo parcial por una persona y que, pudiendo ser el embrión de un futuro negocio, aún no generan ingresos suficientes para que esa persona se pueda dedicar a ellas en exclusiva).
I.4. Simplificación de los trámites para la creación de pequeños negocios.
I.5. Sustitución de la cotización obligatoria a la Seguridad Social de los trabajadores autónomos por un sistema voluntario con alternativas en el sector privado y asociativo/gremial.